Grupo Trevenque contribuye a un proyecto de micromecenazgo para que tres libreros abran en Barcelona un espacio cultural inédito.

Anna, Maria y Gerard, impulsores del proyecto La Casa Usher. / GT.
“No sé cómo sucedió; pero, a la primera ojeada sobre el edificio, una sensación de insufrible tristeza penetró en mi espíritu”. Así empieza la que consideran la obra más importante del escritor Edgar Allan Poe: ‘La caída de la Casa Usher’. Y así debieron sentirse Anna, Maria y Gerard cuando entraron por primera vez en el número 79 de la calle Santaló. Donde otros sólo veían una casa semiderruida de 1910 del barrio barcelonés de Sant Gervasi, ellos vieron el lugar en el que edificar su propio sueño. Y, entonces, una sensación, pero de alegría, les empujó a emprender el proyecto de sus vidas: ‘La Casa Usher’.
Un espacio cultural en el que el mundo de las letras se deja acompañar por el vino y el café hasta crear “un ambiente en el que sentirse parte de él”. Una librería “diferente y con personalidad” que está a punto de parir pero que aún no asoma la cabeza. Estos tres profesionales del sector editorial necesitan una inversión de 10.000 euros para escribir ‘la última página’ de un proyecto original e independiente con vocación de futuro. “Porque estas iniciativas son necesarias para el proceso de reinvención del mundo del libro”, explica Maria F. Serra, una de las impulsoras del proyecto y para quien “el libro es, en sí mismo, un objeto de valor”, más allá de su contenido.
Por eso, con el deseo de abrir sus puertas el próximo mes de marzo, han puesto en marcha una campaña de recaudación de fondos a través de la plataforma de micromecenazgo Totsuma. Las aportaciones pueden ir de 10 hasta 500 euros para particulares y de hasta 1.000 euros para empresas del sector editorial. El objetivo es “sumar esfuerzos hasta lograr la inversión final que necesitamos para alumbrar un espacio que ahora mismo no existe en Barcelona y que puede llegar a ser un lugar de referencia en el ámbito de las librerías”, cuenta Gerard Granados, quien al igual que sus compañeras de ‘viaje’, supo que esta casa de raíces modernistas, antigua bodega de barrio, era el sitio “con alma” que buscaban para ejercer un “oficio fantástico que te hace feliz”: el de librero.
‘La Casa Usher’, pese a tener un perfil editorial independiente y que hará especial hincapié en la lectura infantil y de ficción, ofrecerá todas las secciones habituales en una librería. ¿Dónde reside la diferencia? En la de historias que se encerrarán en su patio, en sus habitaciones de techos altos y puertas luminosas. “Se dará una especial atención al mundo del vino y se programarán todo tipo de talleres, actividades culturales y gastronómicas orientadas a todos los públicos, como conciertos, desayunos de tenedor, catas o lecturas”, explica Maria, que recuerda que todas las donaciones tendrán contraprestaciones en forma de regalo, descuentos, detalles, o bien serán compensadas con eventos a realizar en el espacio. Además, “si no alcanzamos la cifra deseada antes del 25 de enero, ninguno de los donantes deberá aportar la cantidad comprometida”, añade.
Pero, entre tanto, estos 44 días de nudos sobre puertas, peticiones virtuales y sueños compartidos harán todo lo posible para que no se produzca esa situación. Contribuciones como la de Grupo Trevenque dentro de su plan de Responsabilidad Social Corporativa quizás permitan que no haya un final triste para esta historia.
La empresa granadina, con más de 22 años de experiencia en el sector TIC y líder en la creación de herramientas tecnológicas para el sector editorial, ha querido contribuir a este proyecto cediendo gratuitamente a ‘La Casa Usher’ la licencia del software Geslib durante un año. Una aportación que les permitirá sacar el máximo rendimiento a la gestión de su negocio, ahorrando tiempo y costes. “A lo largo de nuestra experiencia en el sector ya habíamos trabajado con Geslib y nos parece la mejor opción del mercado. Ha sido una sorpresa muy agradable y una buena noticia saber que trabajaríamos con esta herramienta”, afirma Maria, para quien el punto de equilibrio entre el libro convencional y la lectura en soportes tecnológicos ya es una realidad.
Todo el equipo de Grupo Trevenque desea a ‘La Casa Usher’ que convierta el cuento de terror de Allan Poe en una historia con final feliz. Suerte.