Si algo ha dejado meridianamente claro -como diría aquel- la Feria del Libro de Fráncfort (posiblemente la mayor y más importante feria del libro de Europa) es que el libro electrónico (eBook) no sólo ha llegado para quedarse, sino que “amenaza” con cambiar los usos y costumbres y el panorama del sector editorial en los próximos años, si no meses.
Por ejemplo, aunque en España aún nos mostramos algo tímidos en la implantación del libro electrónico, ya no será necesario ir a la biblioteca para adquirir un libro en préstamo. Bastará con acceder al sitio web de la biblioteca local, desde casa o desde su dispositivo móvil, para poder disfrutar por descarga o en streaming de la lectura de cualquier eBook de su catálogo o incluso compartir catálogo con otras bibliotecas, ¿por qué no?
En un reciente informe de OverDrive, distribuidor líder en USA de eBooks y audiobooks, el préstamo de ebooks se ha incrementado más de un 200% en 2010. Además prevée que el crecimiento siga acelerándose, incluso triplicándose a lo largo del último trimestre de 2011, que suma ya más de 12 millones de préstamos de eBooks.
Más de dos tercios de las bibliotecas en USA ofrecen el servicio de préstamo de libros digitales, de las que más de 15000 utilizan la plataforma de OverDrive. Entre las que se incluyen, por ejemplo, la New York Public Library.
Mientras que los ejemplares en papel están limitados en el número de copias disponibles y en el número de usuarios que pueden disfrutar del préstamo, el formato digital permite un servicio de préstamo capaz de ofrecer un mismo título a más usuarios al mismo tiempo y acerca la lectura, el uso y el disfrute del servicio bibliotecario a un público más amplio. A fin de cuentas ¿no es esa la esencia de una biblioteca?
OverDrive se ha asociado con Sony, Amazon y Barnes & Noble con el fin de asegurarse de que sus libros sean compatibles con el mayor número de formatos y dispositivos lectores (eReaders) así como tabletas y teléfonos móviles.
La irrupción del formato digital en las bibliotecas públicas ¿creeis que puede atentar aún más contra la producción editorial en papel? ¿cómo valoras un servicio de préstamo de libro electrónico desde las bibliotecas públicas?
fuente: http://paidcontent.org