Son muchas las empresas que han implementado ya soluciones de analítica de negocio (Business Intelligence,BI), desde grandes corporaciones a empresas de menor tamaño. Estas empresas han ido conociendo y reconociendo la necesidad de contar con estas soluciones que ayudan al empresario a la comprensión del funcionamiento actual de su empresa, anticipando información y respaldando la toma de decisiones.
En una situación económica como la actual, es absolutamente necesario contar con un sistema que nos permita, conocer en profundidad y dar respuesta de una manera ágil a los retos que nos plantean los clientes, el entorno y el mercado y así poder ofrecer productos y/o servicios que aporten ventajas competitivas sostenibles, que permitan establecer relaciones rentables a largo plazo con nuestros clientes y que ayuden a detectar oportunidades de negocio, que sin duda, harán crecer nuestros negocios.
Sin embargo, no todas consiguen obtener el máximo beneficio derivado de la incorporación de estas soluciones a su empresa. En muchas ocasiones, no se aprovechan todas las posibilidades que le ofrecen los BI, por desconocimiento de las propias posibilidades de la herramienta o por pensar más en la propia herramienta que en el modelo de negocio, generando una ruptura entre el análisis diseñado y los objetivos empresariales. Una ruptura que, si no culmina con el abandono del proyecto, se sella a base de presupuesto.
Para paliar estas dificultades, es necesaria una reflexión profunda que nos lleve a definir nuestro modelo de negocio, presente y futuro, a partir de la misión y visión de nuestra empresa, invertir el tiempo necesario en alcanzar un adecuado nivel de formación y contar con unos socios tecnológicos que conjuguen el conocimiento tecnológico y de negocio: 1º Determinar objetivos, 2º Buscar un socio tecnológico involucardo con esos objetivos, 3º Determinar las herramientas de BI que ayudará a alcanzarlos.