Recientemente asistimos al Congreso Aslan 2014 donde tuvieron lugar una serie de encuentros y conferencias, con Big Data y almacenamiento masivo de información en la nube como unos de los temas principales.
Hoy día vivimos en un entorno en el que la cantidad de información que se está produciendo es ingente, partiendo de las simples tomas de datos personales a nivel biométrico, que pueden almacenar su velocidad o pulso a la hora de correr, hasta sensores que permiten almacenar la humedad, temperatura, presión atmosférica, etc., en una zona determinada.
Muchos fueron los proveedores que ofrecían sus soluciones tanto de toma de datos como de explotación de los mismos. Por ejemplo, la empresa Mildmac presentaba su solución BDfutura, en la que ofrecen el paquete completo de dispositivos inteligentes y gestión de base de datos, aplicable tanto a eficiencia energética de centros de datos, agricultura, etc. Una solución integral que de una forma muy sencilla permite a las compañías tomar muestras de datos y explotar los mismos desde una interfaz web accesible para el cliente.
Una de las mesas para mí más interesantes fue la protagonizada por los directores de Capgemini, Abertis y Baker Hughes, moderada por el analista Jaime García Cantero en la que se planteaba el futuro del “Internet de las Cosas” y que sistemas requiere como Big Data para su operativa.
Estas compañías están trabajando desde hace años en la gestión eficiente de la información, sobre todo esforzándose en la optimización de tiempos para las respuestas automáticas a sucesos que se producen. Un buen ejemplo es el que mostró Ricardo Ferrero, responsable de marketing de los centros de operaciones de Baker Hughes, compañía que ha facturado en 2013 más de 16 billones de dólares, que presentó cómo desde los diferentes centros de operaciones que tienen repartidos por todo el mundo, pueden controlar de forma automática cualquier fallo que se detecte en las explotaciones de sus clientes y solventarlos de forma instantánea. Miles de muestras de datos de forma continuada hacen posible que sus sistemas sean capaces de reaccionar ante cualquier contingencia, en incluso poco a poco ir llegando a tomar decisiones en base a la experiencia.
Según Gartner, en 2016 el 25% de las principales empresas del mundo habrán implantado tecnología Big Data incluso como medida de seguridad ante el fraude. Como se puede ver las aplicaciones son numerosas.
Evidentemente la tecnología Big Data va a estar cada vez más presente en nuestras vidas, las compañías y los gobiernos lo saben, y las inversiones son cada vez más fuertes para conseguir optimizar sus procesos.